jueves, 11 de junio de 2009

Vida y obra

Ana Estupiña Sánchez, licenciada en filosofía, trabaja como profesora de secundaria y bachillerato en un centro de la comunidad valenciana.
En el libro, lecturas para estrenarse en ética, escrito por Ana Estupiña Sánchez, Consuelo García Bernabé, Carlos Roser Martínez, Ana Lis Giménez, Ana Canela Ballester, Álvaro Rodríguez Ramos, Fco. Calatayud Alenda, podemos encontrar siete capítulos de los cuales el primero es ¿Somos dignos de ser libres? y es en este donde nosotros nos vamos a centrar.
Este capítulo consta de 22 páginas, en las cuales se reflexiona sobre la libertad. Se trata de una narración, ya que, son textos que relatan sucesos que le ocurren a unos personajes en un determinado tiempo y espacio.
Está publicado en la editorial Diálogo, de la colección Tábano.

Este libro trata sobre una chica que discute con sus padres por abusar de la libertad que estos le dan. En mitad de la discusión, sus padres le dicen que ella no se merece la libertad que ellos le están dando, a partir de ahí, ella empieza a reflexionar sobre quien es libre, si alguien tiene que darle la libertad y si la libertad hay que merecerla. Para reflexionar sobre este tema, le ayuda un chico llamado Andrés.

¿De qué trata el libro?




- ¿hay que merecerse la libertad?
- ¿Alguien tiene que darnos la libertad?



La protagonista de este libro reflexiona sobre la libertad con la ayuda de un chico que está estudiando la carrera de filosofía. Él le ayudará a aclarar sus dudas sobre la libertad y para eso le contará la opinión que tenían varios filósofos sobre la libertad.

Diógenes el Cínico, es el primer filósofo mencionado, él pensaba que toda persona que quisiese ser libre debería alejarse de la sociedad, entonces él decidió alejarse de está y de las complicaciones que suponían, para vivir como un perro, haciendo lo que él quisiera.

Los deterministas afirmaban que no había libertad y negaban a los que la defendían, pero ellos pensaban que la conducta humana estaba determinada por una serie de causas i que, no actuaban libremente, sino movidos por esas causas.
Los deterministas pensaban que todos los fenómenos del universo estaban regidos por leyes inexorables, todo lo que ocurriera sería consecuencia de esas leyes.
Dos filósofos que se relacionan con el determinismo son, Leucipo y Demócrito, estos pensaron que todo estaba compuesto por partículas de materia invisible, llamados átomos.

Descarte
s, fue un filósofo francés del siglo XVII, que defendió el mecanicismo para la substancia extensa, pero también defendió la libertad para la substancia pensante.
Con respecto al ser humano, Descartes dijo que si el bien es algo extenso, porque tiene un cuerpo material, es también una substancia pensante, por lo tanto, él defendió el dualismo.


Desde el punto de vista del filósofo Alemán, Kant, la libertad consistía en la autodeterminación, en la capacidad de darnos las propias leyes. Para él, una persona que actuaba siguiendo los impulsos e inclinaciones era un ser heterónomo y no era libre, ya que su conducta se orientaba hacia las cosas externas que provocaban esos impulsos, mientras que quien sigue las leyes morales era un ser autónomo y libre porque no se guía por nadie, sino por las leyes que le da su propia razón.
Kant defendió una postura dualista. Él habló de dos mundos, el mundo fenoménico, que era el de los fenómenos sometidos a las leyes causales de la naturaleza y por lo tanto no libres, y del mundo nouménico, que era el de la voluntad humana que actuaba por leyes diferentes, que provenían de la razón humana, por lo tanto, la libertad.


En cambio, habían otros filósofos existencialistas que defendían la libertad, como por ejemplo, Sartre y Simone Beauvoir, que eran ateos. Ellos pensaban que el hombre estaba solo, que tenía que guiarse por sí mismo, y lo tenía que hacer desde la libertad.
Los existencialistas también pensaban que todo el mundo vivía condicionado y presionado por muchos motivos, pero que a la hora de optar teníamos varias posibilidades a elegir, aunque fuesen pocas...


Mill era un autor inglés del siglo XIX, fue un gran crítico de la sociedad en la que él vivía i en la que defendió las libertades civiles y la tolerancia. La idea fundamental que defendía Mill era que el Estado no tendría que intervenir en la vida privada de las personas, cualquier cosa que hiciese en su vida, bueno o malo. Sólo debería intervenir si lo que hiciese perjudicara a otras personas.


Por último, Marx defendía la ideología del marxismo, él pensaba que la riqueza estaba mal repartida, ya que el mundo estaba dividido en dos partes, una era la de los ricos y otra la de los pobres. Él pensaba que de esta forma no podía haber ningún tipo de libertad, ya que esta situación provocaba que los pobres tuviesen que vender todo lo que tenían a los ricos y convertirse en esclavos.

Crítica Filosófica

Una vez finalizada la lectura del capítulo ¿Somos dignos de ser libres?, nosotros podemos darnos cuenta de los diferentes puntos de vista que tenían cada uno de los filósofos sobre la libertad. A partir de ahí, podemos hacer la valoración crítica sobre las diferencias e igualdades de sus pensamientos.

Diógenes el Cínico es el primer filósofo que aparece en la obra, su manera de ver la vida era muy peculiar, ya que para él la libertad era vivir como un perro, sin tener ningún tipo de preocupación, desconectado de la sociedad. En cambio, los deterministas afirmaban que no había libertad y que todo dependía de leyes mecánicas que determinaban la conducta humana.

Descartes relacionaba la libertad con la sustancia pensante y la sustancia extensa, ya que él defendía el mecanicismo. Para él la sustancia extensa era todas las cosas materiales que ocupaban una extensión, incluidos los animales (para él, los animales eran como máquinas muy perfectas creadas por Dios), sin embargo, para Kant, la libertad estaba relacionada con la razón y utilizaba este término para establecer la libertad del ser humano, porque la razón era para él un hecho incuestionable. Está razón se manifestaba en dos usos diferentes: El uso teórico y el uso práctico. Para él, la libertad consistía en la autodeterminación, en crearse cada uno sus propias leyes.
Una semejanza que tenían Descartes y Kant, era que los dos defendían el dualismo.

La diferencia principal que podemos encontrar entre la ideología de Marx y Mill, es que Marx pensaba que sólo se podía llegar a la libertad cuando se distribuyera mejor las riquezas en el mundo, ya que él decía que unos tenían muy poco y otros tenían demasiado. Por otra parte, el concepto de libertad para Mill era que nadie se podía meter en la vida privada de otra persona, ya que cada uno era consecuente de sus actos.

La mayoría de los filósofos tenían diferentes puntos de vista sobre la libertad, ya que cada uno de ellos vivió en un época distinta, en las cuales, las situaciones sociales y políticas podían influir de manera diferente en las reflexiones que hacía cada filósofo sobre la libertad.


Desde mi punto de vista, la libertad es un concepto muy amplio que permite al ser humano llevar a cabo una determinada acción según su voluntad, ideología y sus propias leyes, siendo responsables cada uno de sus actos. Cada persona debe ser consecuente y debe actuar según sus propios principios, teniendo en cuenta que la libertad de cada persona empieza donde acaba la del de al lado. A esta conclusión he llegado después de haber contrastado los diferentes pensamientos que tenían Kant y Mill sobre la libertad.